martes, 17 de abril de 2007

¿El arte es comunicación?


En un viaje excesivamente largo uno puede ser la víctima colateral de todo tipo de conversaciones profundoides. Sé que está mal, pero casi siempre las evito porque me cansan y al final supongo que será mejor que cada cual haga las cosas a su manera y reciba sus frutos. Pero visto que lo obvio no lo es tanto, volveré a ponerlo por escrito. Tema:


¿El arte es comunicación?

Me refiero en adelante a todas sus facetas (es decir, teniendo en cuenta que arte no es sólo un trabajo más o menos manual y/o visual, que un lector es un espectador de arte forzado a dedicar mucho tiempo a la contemplación de la “obra”, por ejemplo).

Situaros simplemente en la posición de espectador, que es lo que somos generalmente. Si el “autor” no nos transmite nada, ¿seguimos mirando, escuchando, leyendo? Supongo que dejáis de perder el tiempo y os ponéis a otra cosa. Porque tiempo, qué pena, no le sobra a casi nadie. Al menos yo suelo pasar del tema, es cierto.

¿Y qué buscamos cuando vemos cualquier expresión artística? Cualquier cosa, pero quiero creer que, onanismo, no (eso lo hacemos todos solitos, por definición). Que nos digan lo que sea y cómo sea, concreto o abstracto, pero que nos aporten algo. Luego nos podremos situar de nuevo en una situación en que nos guste el mensaje o no, que lo entendamos o no, pero seamos conscientes de que nadie está obligado a gustar ni a degustar. Si no hablamos a nadie, nadie debería escucharnos. Me parece terrible que alguien que asume que no está diciendo nada pretenda que le escuchen y se queje amargamente porque no lo hagan (la gente es de un insensible…). ¿No es absurdo?

Cuando veo las poéticas (por ir al terreno que, se supone, piso mejor) de literatos que posan interesantes sobre su versos, me suelo quedar absorto: ¿Cómo es posible que la mayoría confiese que no quiere decir NADA, como quien dice algo trasgresor y moderno? Existen demasiadas cosas que decir y demasiadas formas de hacerlo como para molestarse y molestar diciendo nada. “Escribo para sobrevivir” dicen como mucho…en fin, eso lo asumo, es posible y mejor opción que pegarse un tiro, pero entonces publican para sobrevivir, entiendo. Teniendo en cuenta las cifras de ventas esto resultaría absurdo. Publicar, exponer, sólo es un derroche de recursos naturales y de tiempo…no es creativo, no ayuda a la catarsis del individuo; salvo que, con ese acto, sienta que cierra el círculo de su obra: llegar a otros, que le entiendan… lo siento, pero eso es comunicarse. Y si se dice algo (con palabras, con pinceladas, con spray…), si se pretende cerrar el círculo, hay que decidir si sólo se llora o se pretende que el encuentro sea una simbiosis donde ambas partes se benefician de alguna forma. Supongo que nadie tendrá que sufrir de tedio para que un “artista” despliegue su técnica, sacie su ego y pasee orgulloso su valía sobrehumana ante los morros de una víctima aburrida que no sabe si sentirse ignorante o pensar que se le ríen en la cara.

Y si no, practiquemos cierto nivel de coherencia: si de verdad hacemos lo que hagamos únicamente por nosotros mismos y nuestra supervivencia, hagámoslo, de acuerdo, pero guardémoslo en un cajón bien escondido. Siendo para nosotros mismos, qué le importa a nadie…

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