El último mosquito romperá el parabrisas

Que este blog merece un cambio de imagen, un cambio de filosofía, que yo mismo le haga caso y/o morir.
Que mañana es lunes.
Que los viajes de vuelta se hacen más largos.
Que circulando yo a 140Km/h entre Salamanca y Valladolid, hay que ser muy hijodelagranputa para pasarme por la derecha y casi comerse un trailer, llevando una berlina tamaño padre, llevando en el asiento de al lado a la mujer, llevando en el asiento trasero a su hijo de unos cinco años. Muy hijodelagranputa.
Que espero no desentonar demasiado en Planetario.
Que ojala el Free Hand sea fácil, o se parezca algo al Quark, si no quiero morir esta semana.
Que mañana, joder, otra vez es lunes.
Que hasta la salida de Palencia está, muchas veces, más alejada que de costumbre de la de Valladolid.
Que tener reproductor de MP3 en el coche es un gran avance. No está mal este disco.
Que es una casualidad sospechosa que ahora baje de estas maneras el petróleo. Y que no sé que hice todos estos años sin un diesel.
Que el domingo hay que ganar al Osasuna para disfrutar del resto de temporada. Sería glorioso.
Que tampoco es tan malo que me guste el fútbol, todos necesitamos al menos una pequeña perversión imbécil; yo tengo varias, pero también prescindo de muchas otras.
Que el xenon tampoco era tan necesario.
Que quizá lo que pasa es que el mapa lleva razón, la ida es cuesta abajo y la vuelta cuesta arriba, la gravedad hace el resto.
Que ser de un equipo pequeño y pobre, que cada victoria sea un tesoro, es lo único que encaja conmigo. Ser de un equipo que gane casi siempre tiene que ser aburrido. Hay algo de metáfora hasta en las perversiones.
Que por más larga que se me haga, la vuelta, sin parar, son cinco horas y media, como la ida. Sólo cambia, que no es poco, el destino.